Pregorexia: La obsesión por mantenerse delgada durante todo el embarazo
"Pregorexia" es un término que se utiliza para describir un trastorno alimentario que afecta a mujeres embarazadas. Se refiere a la preocupación excesiva por controlar el peso y la figura durante el embarazo, lo que puede llevar a una dieta restrictiva e insuficiente, y en algunos casos, a la anorexia y la bulimia. La "pregorexia" es un problema grave de salud mental y física para la madre y el feto, ya que la falta de nutrientes puede causar complicaciones en el embarazo y en el desarrollo del bebé. Es importante que las mujeres embarazadas reciban la atención médica adecuada y el apoyo emocional para mantener una alimentación saludable durante el embarazo.
Muchas mujeres siguen dietas de adelgazamiento para conservar el cuerpo como una sílfide los nueve meses del embarazo. Los médicos alertan sobre este error y desaconsejan totalmente seguir ese tipo de dietas.
Durante la gestación es inevitable subir de peso. La futura madre debe tener en cuenta que esos kilos corresponden a:
- El peso del bebé 3,500 Kg
- El peso de la placenta 1 Kg
- El aumento del útero entre 1,5 y 2 Kg
- El líquido amniótico 500 gramos
- El aumento del volumen plasmático de la madre de 4 a 6 litros
Todo este conjunto da una media de 10 kilos, que desaparecerán después del parto. Se desaconseja superar los 15 kilos durante el embarazo.
Por otro lado no superar los 6 o 7 kilos durante la gestación puede ser perjudicial para el feto, una dieta inadecuada y pobre puede ocasionar malformaciones del sistema nervioso central y del feto en general, retraso del crecimiento del feto, mayor riesgo de muerte fetal, mayor sufrimiento del bebé durante el parto, partos prematuros, etc. Y por supuesto también es perjudicial para la madre, pudiéndole causar: Desnutrición, disminución de la masa muscular, carencia de vitaminas y minerales, alteraciones hormonales y enzimáticas, irritabilidad y cambios de humor, problemas dermatológicos, alteraciones en la lactancia materna, etc.
Las mujeres más propensas a caer en la pregorexia suelen tener muy baja autoestima, son muy inseguras, muy exigentes con ellas mismas y probablemente con antecedentes de anorexia, por lo que les da pánico engordar durante el embarazo.
Cuando una mujer embarazada tiene antecedentes de anorexia, se está tratando en la actualidad o siente terror ante la subida de peso, es muy importante que sea controlada durante todo el embarazo por los profesionales adecuados: psicólogo, nutricionista, ginecólogo…
Síntomas de pregorexia
- Dietas bajas o muy bajas en calorías. Se eliminan las grasas y los hidratos de carbono.
- No hay aumento de peso durante la gestación.
- Alimentación con carencia de vitaminas y minerales.
- Preocupación constante y exagerada por el aumento de peso durante el embarazo y control contínuo de las calorías consumidas.
- Se Intenta evitar el aumento de volumen abdominal, especialmente los últimos meses de embarazo.
- Se hace más ejercicio para eliminar las calorías consumidas.
- Vómitos autoinducidos después de las comidas.
- Negación de que existe un trastorno y dificultad para pedir ayuda y buscar una solución.
Recuerda la importancia de seguir una dieta sana y equilibrada durante el embarazo compuesta de:
- Frutas y verduras de hojas verdes a diario.
- Lácteos a diario.
- Pescado 4 veces a la semana.
- Huevos 2 veces a la semana.
- Pasta 1 vez a la semana.
- Legumbres 1 vez a la semana.
- Arroz 1 vez a la semana.
- Carnes blancas: pollo/pavo 3 veces a la semana.
- Carnes rojas 2 veces a la semana (acompañar con cítricos para absorber mejor el hierro).
En caso de sospechar que una mujer embarazada está experimentando síntomas de pregorexia, es importante buscar ayuda médica de inmediato. Algunos de los signos de la pregorexia pueden incluir una preocupación excesiva por el peso y la figura, una dieta restrictiva, ejercicio excesivo durante el embarazo, y preocupaciones extremas acerca de la salud del bebé.
La intervención temprana es importante para evitar complicaciones graves tanto para la madre como para el feto. Un profesional de la salud puede evaluar la situación y determinar si es necesario un tratamiento específico, como terapia cognitivo-conductual o tratamiento nutricional para ayudar a la mujer a establecer una dieta saludable y equilibrada.
Además, es importante que los seres queridos brinden apoyo emocional y físico a la mujer embarazada, y que se fomente un ambiente positivo en el hogar y en el trabajo para reducir el estrés y la ansiedad. La educación acerca de la importancia de una alimentación saludable y del cuidado prenatal también puede ayudar a la mujer a comprender la importancia de una nutrición adecuada durante el embarazo.
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