Durante los primeros meses de gestación, por efectos hormonales, la mujer embarazada tiende a acumular grasas en abdomen y muslos, para poder tener reservas y poder más adelante nutrir adecuadamente al feto. En los últimos meses de gestación es cuando el feto va a experimentar un mayor crecimiento, por lo que es a partir del segundo trimestre cuando se requerirán dietas con más calorías y nutrientes para la madre.
No todas las mujeres aumentan de peso igual. Va a depender fundamentalmente del estado nutricional previo al embarazo. Así una mujer obesa deberá aumentar de peso menos que una mujer delgada. Una cifra de aumento de peso óptima, para una mujer saludable sería entre 10 y 11 kilos, distribuídos de la siguiente forma: en el primer trimestre de gestación se debe aumentar en total un promedio de 1,5 Kg, y en el segundo y tercer trimestre se debe aumentar una media de 400 gramos a la semana.
Verdadero/falso: 5 ideas erróneas sobre el aumento de peso durante el embarazo
Quieres quedarte embarazada o ya lo estás, pero temes los efectos del embarazo en tu cuerpo. ¿Imaginas que tendrás antojos de alimentos extraños? Te contamos lo que realmente puede ocurrirte y lo que es una idea preconcebida.
Una mujer embarazada tiene más apetito.
VERDAD. El mito de la mujer embarazada con apetito de ogro no es realmente un mito. Durante el embarazo, ciertas hormonas pueden provocar un verdadero aumento de las ganas de comer. Aumentarás tu consumo sin darte cuenta. Pero ten cuidado de no pasarte de la raya.
Durante el embarazo, se gana un kilo al mes
FALSO. No ganarás la misma cantidad de peso cada mes a lo largo de tu embarazo. En el primer trimestre, el aumento de peso es bastante reducido. Algunas mujeres pueden incluso perder peso debido a las náuseas o los vómitos. En el segundo trimestre, comienzan los antojos. En general, en el sexto mes de embarazo deberías haber ganado 6 kilos, nada menos. Por otro lado, si tu curva de peso se dispara, no dudes en hablar con tu médico. En el tercer trimestre, el aumento de peso se acelera. La futura madre ganará entre 1 y 1,5 kilos de media al mes. En las últimas semanas, el aumento de peso puede ser aún más dramático.
Evitaré las estrías si no aumento mucho de peso
FALSO. Es cierto que el riesgo de que aparezcan estrías se reduce si no se gana demasiado peso. Pero éste no es el único factor que interviene en su formación: el cortisol (hormona del embarazo) puede, por ejemplo, provocarlos desde el principio del embarazo. La juventud de la piel y su firmeza también son factores que pueden influir en la aparición de estrías. Un consejo: cuida tu piel.
El aumento de peso ideal durante el embarazo es de 9 kilos.
FALSO. La recomendación habitual para el aumento de peso en el embarazo es de entre 9 y 15 kilos. Sin embargo, esta media es relativa porque se aplica a las mujeres con un peso "normal" antes del embarazo, es decir, las que tienen un IMC de entre 20 y 27. Para las futuras madres muy delgadas, con un IMC inferior a 20, es preferible que ganen un poco más de peso, es decir, entre 12 y 18 kilos. Por último, las personas con sobrepeso y obesidad deben tener mucho cuidado durante el embarazo. Hay que vigilar de cerca su aumento de peso: entre 7 y 11 kilos es una buena media. Pero lo más importante es consultar a tu médico, que es quien mejor puede aconsejarte sobre tu alimentación.
Lo perderé todo por dar el pecho
FALSO: ¡No todas las mujeres pierden peso rápidamente cuando dan el pecho! Una mujer que da el pecho consume más calorías que una que no lo hace. Si la mujer sigue comiendo la misma cantidad de alimentos que antes del embarazo, puede perder peso rápidamente. Por tanto, si la madre come "por dos" para mantenerse a sí misma y a su bebé, su peso puede permanecer estable o incluso aumentar. Por lo tanto, la pérdida de peso durante la lactancia no siempre ocurre.
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Los riesgos de aumentar demasiado de peso
Cuando se tiene sobrepeso durante el embarazo, uno de los principales riesgos para la madre es la diabetes gestacional.
La diabetes gestacional se detecta en torno a la semana 23 o 24 de amenorrea con una prueba que evaluará la glucemia de la paciente. Si la prueba es positiva, se pone en marcha un tratamiento higiénico y dietético durante quince días mediante un fuerte control de la dieta. Los azúcares rápidos están prohibidos y los niveles de azúcar en sangre se analizan antes y después de cada comida. Si la diabetes persiste, debe aplicarse un tratamiento con insulina en función del nivel de azúcar en sangre del paciente.
Un aumento excesivo de peso durante el embarazo también aumenta el riesgo de toxemia e hipertensión. Todas estas condiciones pueden causar preeclampsia. Por último, por parte de la madre, el riesgo de parto por cesárea aumenta con el aumento de peso.
En cuanto al bebé, es probable que tenga un peso al nacer superior a la media, lo que puede tener consecuencias en su salud futura.
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