Yanislen nos ha enviado la eco de su bebé. Ecografía 39 semanas de gestación.
Desarrollo del feto a las 39 semanas
Tamaño y peso
A las 39 semanas, el feto suele medir entre 48 y 53 centímetros de largo y pesa aproximadamente entre 3 y 3,5 kilogramos. Es importante recordar que estas medidas pueden variar y que cada bebé es único.
Desarrollo físico
A esta etapa, el feto ya ha completado la mayoría de su desarrollo físico. Sus órganos están completamente formados y funcionales, aunque los pulmones continúan madurando hasta el momento del nacimiento. La piel del bebé es suave y rosada, y está cubierta por una capa de vérnix caseosa, una sustancia blanca y cerosa que protege su piel del líquido amniótico.
Movimientos fetales
Es probable que notes un cambio en los movimientos de tu bebé. Aunque el feto sigue siendo activo, el espacio dentro del útero es limitado, lo que puede hacer que los movimientos sean menos bruscos y más rodantes. Es esencial seguir monitoreando estos movimientos y comunicarte con tu médico si notas una disminución significativa.
Preparativos para el parto
Señales de parto
A las 39 semanas, es vital estar atenta a las señales de que el parto puede estar cerca. Estas señales incluyen:
- Contracciones regulares: A diferencia de las contracciones de Braxton Hicks, las contracciones de parto son regulares, dolorosas y aumentan en intensidad y frecuencia.
- Rotura de aguas: La ruptura del saco amniótico puede ocurrir de forma repentina o como un goteo lento.
- Expulsión del tapón mucoso: Este tapón, que ha sellado el cuello del útero durante el embarazo, puede salir en las semanas, días o horas previas al parto.
- Dolor de espalda: Un dolor persistente en la parte baja de la espalda puede ser una señal de que el parto está cerca.
Preparación del entorno
Es un buen momento para asegurarte de que todo esté listo para la llegada del bebé. Revisa tu bolsa para el hospital, prepara la cuna y organiza todo lo necesario para los primeros días en casa. También es recomendable tener a mano los números de contacto de tu médico y del hospital.
Cuidados de la madre
Alimentación y descanso
Mantén una dieta equilibrada y rica en nutrientes. Es fundamental mantenerse hidratada y evitar alimentos que puedan causar malestar. Descansa siempre que puedas y trata de dormir en una posición cómoda, preferiblemente de lado, con una almohada entre las piernas para mayor soporte.
Actividad física
Realizar ejercicios suaves, como caminar o practicar yoga prenatal, puede ser beneficioso. Estos ejercicios te ayudarán a mantenerte activa, mejorar la circulación y reducir el estrés. Consulta siempre a tu médico antes de iniciar cualquier actividad física nueva.
Control médico
Las visitas al médico son cruciales en esta etapa. Durante las consultas, se monitoreará la salud del bebé y la tuya, se evaluará la posición del feto y se realizará un seguimiento del progreso hacia el parto. No dudes en plantear cualquier duda o inquietud que tengas.
Consejos finales
Mantén la calma
La anticipación del parto puede generar ansiedad, pero trata de mantener la calma y confiar en el proceso. Rodéate de personas que te brinden apoyo emocional y no dudes en expresar tus sentimientos.
Infórmate y prepárate
Asistir a clases de preparación para el parto puede ser muy útil. Estas clases te proporcionarán información valiosa sobre lo que puedes esperar y cómo manejar el dolor y el estrés del trabajo de parto.
Escucha a tu cuerpo
Presta atención a las señales que te envía tu cuerpo. Si sientes algo fuera de lo normal, no dudes en contactar a tu médico. Es mejor ser cautelosa y asegurarte de que todo está bien.