eco lorenzo linares

Chuky Linares nos ha enviado la eco de su bebé. Ecografía de 27 semanas de gestación.

Desarrollo del feto en la semana 27

En la semana 27, el feto tiene aproximadamente 36 cm de largo y pesa alrededor de 900 a 1.000 gramos, aunque estos valores pueden variar ligeramente dependiendo de cada embarazo. El crecimiento es acelerado en esta etapa y el bebé empieza a ganar más peso en forma de grasa subcutánea, lo que le permitirá regular mejor su temperatura corporal al nacer.

Cambios importantes en el desarrollo

  1. Pulmones en maduración: Uno de los avances más significativos en esta etapa es la maduración de los pulmones. Aunque todavía no están completamente desarrollados, los pulmones comienzan a producir surfactante, una sustancia esencial para que los alvéolos (pequeños sacos pulmonares) se expandan correctamente después del nacimiento. Esto es clave para que el bebé respire de forma autónoma al nacer.
  2. Cerebro en pleno crecimiento: El cerebro del bebé está creciendo a un ritmo acelerado. Las conexiones neuronales se están formando y esto le permitirá empezar a procesar estímulos del entorno. Durante esta semana, los movimientos del feto son más coordinados y es posible que notes más patadas y movimientos bruscos.
  3. Audición y respuestas a estímulos externos: A las 27 semanas, el sentido del oído está bastante desarrollado. El feto ya es capaz de reconocer voces y reaccionar a sonidos externos, como la música o la voz de sus padres. Este es un buen momento para empezar a hablarle o ponerle música relajante.
  4. Ciclo de sueño-vigilia: El feto ya empieza a tener patrones de sueño más definidos. Es probable que en algunas horas del día lo sientas más activo, mientras que en otras esté más tranquilo, lo cual coincide con sus momentos de descanso.

¿Qué siente la madre en la semana 27?

Este periodo del embarazo también trae cambios importantes para ti. El útero ha crecido considerablemente y puede llegar hasta unos 7 cm por encima del ombligo. Esto puede generar cierta incomodidad, especialmente al sentarse o al dormir. A continuación, te explicamos algunos de los síntomas más comunes:

  1. Fatiga: La fatiga es uno de los síntomas más habituales en el tercer trimestre. El aumento de peso y los cambios hormonales pueden hacer que te sientas más cansada de lo habitual. Es importante que sigas descansando lo suficiente y que encuentres momentos para relajarte.
  2. Dolores de espalda: Debido al peso extra y la expansión del útero, el dolor de espalda puede volverse más frecuente. Asegúrate de mantener una buena postura y, si es necesario, utiliza cojines de apoyo al sentarte o dormir.
  3. Contracciones de Braxton Hicks: Son contracciones uterinas irregulares y no dolorosas que puedes empezar a notar alrededor de la semana 27. Estas "falsas contracciones" son una preparación del útero para el trabajo de parto. No debes alarmarte, pero si se vuelven dolorosas o muy frecuentes, consulta a tu médico.
  4. Retención de líquidos e hinchazón: Es común notar hinchazón en los pies y las manos debido a la retención de líquidos. Intenta mantener los pies elevados cuando estés sentada y asegúrate de beber suficiente agua para favorecer la eliminación de líquidos.