Todas las mujeres embarazadas experimentan micciones frecuentes durante las primeras semanas de embarazo. Pero, ¿por qué siempre tienes que orinar desde que te quedaste embarazada?
¿Por qué dan tantas ganas de orinar durante el embarazo?
La necesidad frecuente de orinar se debe a la presión que ejerce el útero sobre la vejiga y al aumento del flujo sanguíneo que obliga a los riñones a procesar más líquido.
Estas molestias desaparecen durante el segundo trimestre y vuelven a aparecer hacia el final del tercer trimestre, cuando el bebé desciende a la pelvis y presiona la vejiga. Al final del embarazo, la necesidad más frecuente de orinar es una señal de que se acerca el parto.
No existe ninguna medida para prevenirlo. Pero te recomendamos que evites bebidas con efecto diurético, que no aguantes las ganas de orinar porque a la larga los músculos del suelo pélvico se irán debilitando y que cuando vayas al baño intentes vaciar completamente la vejiga (si te inclinas un hacia adelante favorecerás el vaciado).
No bebas menos para reducir las ganas de orinar. Asegúrate de mantenerte hidratada para evitar el estreñimiento y el riesgo de infección de las vías urinarias. Se obtiene alrededor de 1 litro de agua de los alimentos. Además de esta ingesta, se recomienda beber al menos 1,5 litros de agua al día.
También son muy frecuentes las pérdidas de orina al toser, estornudar, reírse, etc. Las causas pueden ser la presión que ejerce el útero a la vejiga o que los músculos del suelo pélvico están débiles. Cuando más suele pasar es durante el tercer trimestre de embarazo y después del parto. Los consejos son los mismos de antes, no aguantes la orina e intenta vaciar bien la vejiga siempre que vayas al baño. No practiques ejercicios con la vejiga llena, mejor si antes de hacer ejercicio pasas por el baño. Además es muy recomendable que hagas los ejercicios de Kegel, para fortalecer el suelo pélvico. Puedes hacerlo durante todo el embarazo y después del parto.
¿Cómo Reconocer los signos de una infección urinaria?
La micción frecuente en las mujeres embarazadas es normal y no es necesariamente un síntoma de infección del tracto urinario. Sin embargo, es importante que consultes a tu médico si experimentas los siguientes síntomas:
- Dificultad para empezar a orinar.
- Sensación de ardor al orinar.
- Orina que sale en gotas en lugar de un chorro.
- Sentir que necesita ir de nuevo justo después de orinar.
- Dolor en el bajo vientre, especialmente después de orinar.
- Sangre en la orina.
Recuerda que las infecciónes de orina son frecuentes en las embarazadas y necesitas tratamiento médico, para evitar complicaciones más graves.
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