¿Puedo darme un baño de agua caliente durante el embarazo?
La respuesta es sí, siempre que el agua del baño esté tibia y no demasiado caliente.
¿Por qué se deben evitar baños calientes durante el embarazo?
Es mejor evitar los baños calientes durante el embarazo debido al riesgo de sobrecalentamiento y el mayor riesgo de mareos y desmayos. Un aumento significativo en la temperatura corporal central, particularmente durante las primeras 12 semanas, podría interferir con el desarrollo de tu bebé.
Cómo tomar un baño durante el embarazo
Siempre que el baño esté tibio y no eleve la temperatura central de tu cuerpo más allá de los 39°C durante más de 10 minutos, aún puedes disfrutar de un período de relajación en la bañera. De hecho, relajarse en el baño puede ser muy beneficioso para las mujeres embarazadas aliviando los dolores y molestias del embarazo.
Verificando la temperatura del agua
Verifica la temperatura del agua sumergiendo el codo (más sensible al calor que las yemas de los dedos de los pies) antes de entrar, lo cual también es una buena práctica para cuando llegue el bebé. Si quieres estar segura de la temperatura del agua, puedes invertir en un termómetro de baño. Lo ideal es que la temperatura del agua no supere la temperatura corporal, alrededor de 37 grados.
Si anhelas algo un poco más caliente, puedes optar por una ducha corta y caliente, siempre y cuando no te quedes demasiado tiempo, y no esté demasiado caliente y humeante.
¿Puedo usar un jacuzzi o una sauna mientras esté embarazada?
Saunas y jacuzzis también deben evitarse durante el embarazo debido al sobrecalentamiento, deshidratación y riesgo de desmayo. En realidad, son mucho peores que un baño caliente, porque a diferencia del agua de baño que comenzará a enfriar una vez que dejas de agregarla, la temperatura en un jacuzzi, sauna o bañera de hidromasaje permanece con un calor constante. Tu temperatura central aumenta porque el cuerpo se vuelve ineficaz para enfriarlo a través de la sudoración.
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